Mis Dios@s del Crepúsculo... ¡GRACIAS!

martes, 30 de octubre de 2012

¿AMARTE U ODIARTE?


******************************
****************************
Capítulo 11: Creo en ti.
Yess pov. 

Abrí los ojos, totalmente sobresaltada, después de sentir mi cuerpo arder en sudor… 

Jazz se encontraba sentado en el sofá con una mano en mi pelo y la otra en mi cintura. Su cara parecía totalmente relajada y su respiración suave y rítmica. 

Sí, se había quedado dormido. 

Intenté incorporarme un poco, ya que mi cabeza descansaba en su regazo, pero fallé inútilmente. Me dolía todo el cuerpo y la cabeza… dios… iba a explotarme en cualquier momento. 

Cerré los ojos nuevamente y con la mano que descansaba encima de mi abdomen, restregué mi frente perlada en sudor. 

-¿Qué me pasa?- susurré para mí notando cómo me desvanecía de nuevo.
Me tranquilicé, o al menos lo intenté, para que mi respiración no estuviera así de errática y con temor de despertar a Jasper. 

Cuando estuve segura de que mi cuerpo respondía a mis órdenes, cogí la mano de Jasper y se la puse en el sofá con suavidad para no despertarlo.

Después de contar hasta diez, me levanté con cuidado y me dirigí directamente a la cocina para tomarme los medicamentos y un poco de agua. 

Justo cuando me había tragado las dos pastillas de golpe, mi móvil comenzó a sonar como un loco. Corrí hacia él, sintiéndome ligeramente mareada y descolgué con un susurro. 

-¡Yess!- era Romina. 

-Romina…- susurré y entré en mi habitación y cerré la puerta para que no molestar a Jasper. 

-¿Por qué susurras? ¿Qué tal te encuentras? ¿Te trata bien Jazz?- cerré los ojos a la vez que me dejaba caer en la cama con pesadez y me aparté el pelo de la cara con mi mano libre. 

-¿Por qué preguntas tanto?- suspiró- Susurro porque Jazz está dormido, me encuentro un poco mejor, pero para no tirar cohetes y sí, me trata demasiado bien- le aclaré y volví a escuchar otro suspiro. 

-Me alegro…- algo andaba mal, su voz no era sincera… 

-¿Qué pasa, Rom?- inquirí preocupada y decidí en ese mismo instante que necesitaba un baño como el comer. 

-Na… nada, no es nada…- su voz era nerviosa y no me creía nada de lo que me decía… 

-Enserio, dímelo- me levanté y me dirigí al baño. 

Entré en él y puse el tapón en la bañera y abrí el grifo, aspirando el vapor del agua ardiendo. 

-No quiero que te preocupes, ¿está bien?- rodé los ojos, ya que eso, a estas alturas, era al patético. 

-No sigas con tu actitud de madre, Romina, quiero saberlo ya, dime lo que sea- le pedí desesperada- ¿Pasa algo con Emmett? 

-¡NO!- gritó demasiado para mis débiles oídos y sentí un pitido en ellos- Emmett es un encanto, Yess, enserio- sonreí a medias porque todavía se me hacía muy raro ver al que un día fue el amor de mi vida con mi hermana…- He soñado con algo terrible- abrí mucho los ojos y corté el agua caliente. 

-¿Qué has soñado?- inquirí un poco nerviosa. 

-Vi a Jasper… lo vi con un bebé en sus brazos recién nacido y un enorme charco de sangre a sus pies…- volví a cerrar los ojos, ahora sí que me estaba desmayando. 

-¿Qu… qué dices?- susurré a duras penas. 

-Sí, cariño, no quiero que te preocupes, pero estoy tan angustiada y preocupada por ti…- la escuchaba con dificultad- No debería habértelo contado…- susurró angustiada. 

¿Por qué habría soñado con eso Romina? 

No era como si pudiese ser verdad… 

Todo esto era demasiado extraño. 

Me tranquilicé por segunda vez en este día, con más dificultad que la primera vez y exhalé todo el aire de mis pulmones. 

-Vale… tranquilízate, ¿de acuerdo?- le susurré- No va a pasar nada de eso, ha sido una pesadilla y ya, tienes que olvidarla. 

-De… de acuerdo- dijo vacilante. 

-¿Cómo ha ido el vuelo?- decidí cambiar de tema, ya me comería la cabeza más adelante con su sueño/pesadilla… 

-Bien, Emmett me ha cuidado en todo el camino, es tan bueno, Yess…- sentí una punzada en mi corazón, pero decidí olvidarla… tenía que hacerlo, yo ya no amaba a Emmett, mi hombre sólo estaba a unos metros de mí… 

-Me alegro- le dije sinceramente- Espero que todo os vaya genial, de verdad. 

-Nena- susurró lentamente- Perdóname, soy una burra… no debería estar diciéndote nada de esto, no es cómodo…- sonreí porque de verdad que muchas veces podría ser mi madre. 

-Por eso no te preocupes, cariño- sonreí más ampliamente- Eso ya es pasado, Romina, ahora tenemos que seguir adelante y no mirar atrás. Llegará el día en que todo esto sea lo más natural del mundo. 

-Necesito creer eso… 

-¿Lo extrañas?- hasta yo misma me sorprendí por mi amarga pregunta…
No pensaba que pudiera salir de mi boca y menos tan pronto, pero creo que la necesidad es la mayor de las fuerzas… 

-No- susurró con la voz más sincera que jamás le había escuchado- Te mentiría si te dijera que no lo quiero, es mi amigo, fue mi hombre hace muy poco y la clave fue que fue el primero, pero no por eso, lo extraño- aclaró- Quédate tranquila, cariño, te aseguro que no hay nada en mi corazón hacia Jazz que no sea amistad y cariño- dejé salir todo el aire de mis pulmones con una enorme sonrisa. 

Necesitaba escuchar esas palabras… 

-Gracias, Rom, de verdad, necesitaba que me dijeras eso. 

-Es la verdad, nena- sentí el sonido de unos besos- Bueno, voy a colgar, necesitamos descansar para mañana- soltó una risilla- Me has hecho cosquillas…- sonreí al recordar cómo era Emmett. 

-Bien, descansad, te quiero muchísimo. 

-Yo también, y…- abrí los ojos al escuchar ese suspenso en la frase- Yo no creo que tú extrañes a Emm…- y colgó dejándome confundida.

¿De verdad era así? 

Absolutamente, sí. 

Justo cuando iba a dejar el móvil encima del lavabo de mármol, sentí la cálida mano de Jasper en la mía. 

-Preciosa, ¿cómo estás?- lo miré directamente a los ojos y lo abracé con mis ojos bañados en lágrimas. 

-No sé cómo estoy…- susurré a duras penas por mis sollozos y él intentó separarme de su cuerpo, pero yo se lo impedí- Necesito creer en ti…- le susurré empañando su camisa con mis lágrimas. 

-¿Qué pasa, Yess? ¿Qué necesitas creer?- inquirió mientras me acariciaba el pelo con suavidad. 

-Necesito saber que tu corazón sólo tiene una dueña y que ésa sea yo- cerré más los ojos, apretándolos e intentando que las lágrimas no siguieran saliendo- Necesito saber que te has olvidado completamente de Romina…- susurré con la voz rota y él enterró su cara en el hueco de mi cuello, aspirando y besando la base del mismo. 

Intentó separarse de mí y ésta vez lo dejé. 

-Yess, te juro por mi vida y por mi existencia, que tú eres la única que reina mi corazón, tú eres la única que me hace suspirar, tú eres la mujer de mi vida- suspiró cogiendo mi cara con ambas manos para limpiar mis lágrimas con sus pulgares- Eres la única que quiero en mi vida, tú lo eres TODO, te lo juro, Yess, no hay ningún pensamiento para ninguna otra mujer, sólo eres tú- pude ver en sus ojos tan azules como el mar la más sinceridad profunda, la peor angustia de todas por creerle, el mayor amor de todos… 

-¿De… de verdad?- me sorbí la nariz y lo miré más profundamente. 

-Te lo juro, mi vida- se acercó un poco más a mí y me besó tiernamente en los labios- Me he vuelto completamente loco cuando me he despertado y no estabas a mi lado…- sonreí a escasos centímetros de sus labios- Sólo quiero tenerte en mis brazos para siempre y hacerte olvidar todos los momentos malos del pasado. 

Ahora fui yo quien se acercó a él y lo besó profundamente. 

PVO ROMINA 

El camino rumbo al aeropuerto fue breve entre la linda canción que me dedicó Emmett  y la incertidumbre de lo que se venía, hacía mucho que no tenía esta sensación de incertidumbre, miedo pero a la vez alegría que hoy me embargaba…

Nada me garantizaba que todo iría mal, sin embargo nada tampoco me garantizaba que todo sería miel sobre hojuelas, si algo había aprendido en estos días es que nadie puede exigir una vida perfecta, la vida misma es perfecta dentro de su imperfección; no puedes pedir más de lo que la vida puede dar, muchas veces no tenemos todo lo que queremos pero podemos querer lo que tenemos para iniciar a luchar por lo que aún no tenemos.

Esa fue mi lección de estos problemas, aprendí de la vida, me caí y cometí errores al dejarme llevar, pero al final como dice el dicho: “no hay mal que por bien no venga”, de cierta manera todo lo que pasó me llevó a la felicidad que hoy compartía con mi novio.

-¿Qué piensas preciosa?-. Preguntó Emm sacándome de mi ensoñación mientras entrábamos al estacionamiento del aeropuerto internacional.

-Que en ocasiones te obsesionas porque las cosas salgan de una manera determinada, te fías demasiado de tu pensamiento o de tu sentir, sin buscar el equilibrio que es realmente la felicidad-. Respondí sonriendo abiertamente.

-No te arrepientas de nada guapa, las cosas pasan por algo y hoy inicia nuestro amor, nuestra aventura-. Contestó mi novio con esos hoyuelos tan lindos que siempre enmarcaban sus alegrías.

-Te amo ¿lo sabes?, no imaginas el dolor que me da el solo pensar en perderte lo mucho que la distancia me hería y lo maravilloso que es despertar rodeada en tus brazos sabiendo que todo irá bien de ahora en adelante-. Murmuré con la voz rota por las lágrimas de gozo que se empezaban a escapar de mis ojos. 

-Yo te amo mucho más, por ti iría hasta el fin del infinito y volvería sólo por ver tu sonrisa, no imaginas el bien que me hace tu presencia-.  Dijo mientras estacionaba el Jeep, para acercarse a mí lentamente y darme un beso cargado de pasión, comprensión y amor.

-Jamás te alejes por favor, nunca sueltes mi mano-. Supliqué sincerando los últimos miedos que aún guardaba mi alma.

-Te juro que mientras no me quieras sacar de tu vida siempre estaré para ti, te apoyaré, cuidaré y haré de tu vida la más feliz posible-. No resistí la tentación ante sus palabras y me abalancé sobre él en un beso de pacto, fuerte, posesivo y pasional.

Pasaron unos segundos hasta que nuestra respiración se volvió errática y a sabiendas de lo que se vendría si no nos separábamos pronto, con los labios hinchados y una sonrisa traviesa en la boca de ambos salimos tomados de la mano del jeep con las maletas a nuestros costados.

-¿Me podrían prestar sus tickets de abordaje por favor?-. Pidió amablemente la aeromoza al notar la distracción de ambos.

-Claro, tome-. Respondí extendiéndole los boletos del avión,  al poco rato estábamos subidos y almorzando una deliciosa pasta a la bolognesa con vino blanco para acompañar.

Sin darme cuenta caí dormida en el transcurso de vuelo, habían sido demasiadas las experiencias en tan pocos días y mi mente había trabajado el doble de lo normal para procesar todo y aceptar los cambios; así que ahora me pasaba la factura con un inagotable sueño.

El principio del sueño fue tranquilo, yo estaba recostada en mi cama de Chicago, sentía a Emm a un costado mío trazando suaves e inexistentes círculos en mi brazo, pero poco a poco todo se volvía oscuro, escuchaba los gemidos de dolor de una mujer que gritaba desgarrada, me levantaba y corría hacia donde procedían los alaridos, y me encontraba con Jassper con una bebé en brazos, parecía recién nacida, con un charco de sangre a sus pies…

Sobresaltada desperté con la respiración agitada y la pupila moviéndose a mil por hora, Emmett me miró angustiado…

-¿Qué pasa?-. Inquirió asustado, acariciando mi cabello intentando calmarme.

-No va da nada, ah sido solo una pesadilla-. Dije sumiendo mi cabeza en su pecho aspirando su varonil aroma.

-¿Quieres hablarlo?-. Cuestionó dándome un beso en la coronilla, su presencia era extrañamente relajante.

-Quizá más tarde, por ahora solo quiero volver a dormir, ¿vale?-. Dije quitando la división entre ambos asientos para poderme acurrucar en el regazo de Emmett.

-Cuando quieras, aquí me tienes, descansa ahora cariño-. Dijo tapándome con una colcha dado que el ambiente se comenzó a tornar frio.

Tardé unos minutos para reanudar el sueño, apenas y lo pude conciliar, aparentemente morfeo estaba peleado a muerte conmigo, tras media hora de intentos infructuosos, un tanto frustrada abrí los ojos topándome con que Emm se había dormido con su brazo aferrado a mí.

Alcé mi mano levemente para acariciar su mejilla, dormido parecía un pequeño crío, sus hoyuelos se marcaban levemente y los rayos del sol daban un aspecto negro cuervo de ala a su cabello, dándole una imagen casi celestial…
No comprendía el porqué de mi extraño sueño, ni de esta sensación entre angustia y alegría que se posaba en mi pecho y corazón, quizá solo eran los nervios de este cambio en mi vida… tal vez mi mente aún no aceptaba ver a mi ex pareja con mi hermana… pero ¿Por qué esta extraña sensación?

Decidí enviarle un breve texto a mi Yess, tal vez eso le diera un poco de paz a mi alma, ya más tarde le llamaría y me aseguraría que estuviera bien, una vez que hubiésemos aterrizado y yo me encontrara en la comodidad de mi piso.

Querida Yess:
Hermanita, espero te encuentres mucho mejor, me quedé un poco angustiada por tu semblante, ¿has tomado ya tus medicamentos?, ¿cómo te cuida Jassper?
Haz el favor de no ir a clases, lo más conveniente es que te cuides y te recuperes por completo.
Te llamaré en cuanto aterrice.
Todo mi cariño.

Envié el mensaje y puse la reproducción aleatoria de música en mi celular, mientras me ponía los auriculares para no interrumpir el sueño de Emm…
Una media hora más y  llegaría por fin a mi destino.

Ya no importa cada noche que espere,
Cada calle o laberinto que crucé,
Porque el cielo ha conspirado en mi favor
Y en un segundo de rendirme te encontré…

Piel con piel,
El corazón se me desarma,
Me haces bien,
Enciendes luces en mi alma.

Creo en ti
Y en este amor
Que me ha vuelto indestructible,
Que detuvo mi caída libre.

Creo en ti
Y mi dolor se quedo kilómetros atrás…
Y mis fantasmas hoy por fin están en paz…

El pasado es un mal sueño que acabo,
Un incendio que en tus brazos se apago,
Cuando estaba a medio paso de caer
Mis silencios se encontraron con tu voz.

Te seguí y rescribiste mi futuro
Es aquí mi único lugar seguro…

Creo en ti
Y en este amor
Que me ha vuelto indestructible,
Que detuvo mi caída libre.

Creo en ti
Y mi dolor se quedo kilómetros atrás
Y mis fantasmas hoy por fin están en paz…

2 comentarios:

  1. Cariño, millones dr gracias por publicarlo tan pronto. Te lo agradezco en el alma.
    Espero q te haya gustado el capítulo, sabes q yo adoro tus letras.
    A mi, tu parte, me ha encantado, ha sido corta, pero intensa.
    Espero saber de ti pronto.
    Muchos besos y abrazos.
    Te quiere,
    Romiina R.

    ResponderEliminar
  2. Yess,
    me ha gustado muchísimo el capítulo!!!!
    Ya estoy dándole vueltas y un poco angustiada por ese sueño que tuvo Romina...esperemos que no signifique nada malo y que todo se quede en un susto.
    Me han encantado las dos partes. Se nota a leguas los sentimientos que ambas desprendéis y sobre todo los miedos e inseguridades.
    Muchos besos y abrazos, Yess; y muchísimas gracias por todo el apoyo que me has dado con la historia...no sabes lo agradecida que estoy por todo lo que estás haciendo :)
    CM

    ResponderEliminar

Los comentarios son la base inicial que todo escritor necesita para que su inspiración fluya. Tu opinión es muy importante para mí.
Por favor, ¡NO TE VAYAS SIN COMENTAR!